Un juez federal de San Francisco, Edward Chen, detuvo temporalmente la decisión del gobierno de Donald Trump de poner fin al Estatus de Protección Temporal (TPS) para venezolanos. Esta medida judicial representa un alivio para más de 300 mil migrantes venezolanos que ahora podrán permanecer en Estados Unidos por el momento.
El TPS fue otorgado por primera vez a los venezolanos en 2021 por la administración de Joe Biden, debido a la grave situación de inestabilidad política y económica en Venezuela bajo el gobierno de Nicolás Maduro, lo que generó altos índices de criminalidad.
La decisión del gobierno de Trump de revocar el TPS, anunciada el pasado 3 de febrero por el Departamento de Seguridad Nacional, amenazaba con la deportación de miles de venezolanos a partir de abril, lo que podría haber desencadenado una crisis migratoria significativa.
La intención de finalizar el TPS se enmarca en una política más amplia del presidente republicano Donald Trump, cuya meta era restringir los programas migratorios y humanitarios, bajo la justificación de que estos sobrepasan los límites de la legislación estadounidense.
El juez Chen fundamentó su dictamen en los argumentos presentados por la Alianza Nacional TPS, que defiende los derechos de los migrantes, y la decisión del juez se fundamenta en que esta acción del gobierno de Trump causaría daños irreparables a los migrantes venezolanos.