Este Jueves Santo, inició la Iglesia Católica el Triduo Pascual, el misterio central de la fe cristiana.
En la Basílica Catedral de Valencia, la Santa Misa, en Memoria de la Última Cena del Señor, fue presidida por el Excmo. Mons. Jesús González de Zárate Salas, Arzobispo Metropolitano de Valencia y concelebrada por el padre Pedro De Freitas, párroco de Catedral.
“Un modo privilegiado para nosotros es que Jesús está presente en el altar, es para nosotros alimento de vida y salvación”, manifestó monseñor González de Zárate en su homilía.
“En este día, la Iglesia agradece a Dios porque en su Hijo nos ha dejado este gran regalo (la Eucaristía)”.
El prelado valenciano hizo referencia al Año Jubilar, expresando: “Que esta Pascua 2025, celebrada en el Año Santo de la Esperanza, nos haga crecer en esta virtud, en medio de las dificultades; ser signos, testigos del amor y misericordia de Dios entre nosotros”.
Esta celebración litúrgica recuerda el mayor regalo que nos dejó Jesús, la Eucaristía, el servicio a través del gesto del lavatorio de los pies, y el sacerdocio.
TEXTO: NDP